Sé que muchos no conocéis los "volaores, como comúnmente se le conoce por la zona del estrecho de Gibraltar y Ceuta. Por eso antes de compartir la receta quiero hacer una pequeña introducción:

El pez volador es un pez de pequeño, apenas sobrepasa los 30 cm, y se caracterizan por tener grandes aletas que le permiten planear, sobre el agua, distancias de hasta 50 metros en pocos segundos... es una gozada verlos, os lo aseguro!!!

Entran, desde el Atlántico hasta el Mediterráneo, en el mes de Mayo para desovar y dejar sus huevos en aguas más templadas. Regresa al Atlántico en los meses de Julio y Agosto y es ahí donde se produce su captura... después del desove.

Curiosamente no es un pez que se consuma fresco, que también se puede, pero es más común hacerlo tras un proceso de salazón y posterior secado. Por su escasa producción, y tiempo limitado de captura, lógicamente también tienen un tiempo limitado de consumo. Por suerte hoy contamos con buenos congeladores y así podemos consumirlo durante todo el año en diferentes elaboraciones.

Esta que hoy os dejo es una de ellas y tiene su pequeña historia:

Recién casada mi marido me comentó que su abuela, una mujer mayor ya, solía hacer un guiso con fideos y volaores que a él le gustaba mucho. La verdad es que hasta entonces no tuve mucha conciencia de esta receta y no recuerdo si mi madre la hizo alguna vez en casa, seguro que si, pero yo debía ser pequeña y no la recordaba.

Pensé en aquello de que "un buen guiso parte de un buen sofrito" y partiendo con los escasos conocimientos que tenía en aquel momento en gastronomía, pero usando un poco la lógica, me armé de valor y un día hice la "cazuela de fideos guisaos" que tanto gustaban a mi marido. Ni que decir tiene que fue todo un éxito y se convirtió en parte de nuestro menú semanal cuando era la temporada. 

Años más tarde, con la incorporación de Thermomix® a mi cocina, la he adaptado a este magnífico y leal  compañero. 

Espero os guste y os animéis a hacerla...os aseguro que os sorprenderá su sabor!!!